Muchas veces eso de pensar en llevar una dieta, ya nos desespera. De ahí que ahora no le vamos a poner el nombre concreto pero sí que daremos paso a una serie de ideas que apuestan por llevar una alimentación sana. Comer de forma saludable es posible y sin tener que realizar grandes sacrificios. Además, tenemos que pensar siempre en que todo ello nos va a dejar una salud de hierro y esto ya es una de las mejores ventajas a tener en cuenta. Hay que darle prioridad a lo que comemos y a los hábitos que tenemos cada día. Si quieres dar el paso solo tienes que aplicar las siguientes ideas.
Índice
Darle forma a un plato saludable
Cuando miramos al plato que vamos a tomar, ¿qué vemos?. Seguro que en él hay muchas cosas que sobrarían y otras muchas que faltan. Pero no en cuestión de alimentos en sí, sino en propiedades nutricionales. Por eso, es importante tener en cuenta lo siguiente:
- La mitad del plato tiene que estar compuesta por verduras. Porque son ellas las que nos aportan la fibra así como las vitaminas o minerales que necesitamos.
- Un cuarto de dicho plato, estará compuesto por pan integral o arroz integral que nos aportará los hidratos necesarios.
- Otro cuarto, o un poco más, serán las proteínas. Éstas las podemos encontrar en carnes blancas o bien en el pescado o los huevos.
- Para cocinar, puedes usar una cucharadas de aceite de oliva, que será quien nos aporte las grasas pero siempre mucho más saludables de lo que pensamos.
No te saltes ninguna de las 5 comidas diarias
Cuando tenemos unos horarios establecidos, no siempre es sencillo lleva a cabo una idea como ésta. Pero desde luego, es una de las mejores. ¿Por qué?, pues porque comiendo varias veces al día hará que lleguemos a la siguiente comida con menos ganas. Por lo que no devoraremos ni nos dejaremos llevar por los antojos. Ya que estos no traen nada bueno, sino más bien azúcares o grasas varias. De ahí que cada día debemos hacer un total de 5 comidas, comiendo poco pero lo justo en cada una de ellas y controlando las cantidades de grasa, para añadir más nutrientes y proteínas.
Siempre mastica despacio
Es habitual que por el estilo de vida que llevamos, las prisas estén a la orden del día. Unas prisas que no nos dejan nada bueno. Sobre todo, cuando se trata de las comidas. Lo mejor es masticar despacio cada bocado. Hay que dedicarle un cierto tiempo ya que hará que nos sintamos más saciados antes de tiempo. Sino, la prisa hará que los alimentos no vayan bien masticados, tengamos más hambre y las digestiones se vuelvan más pesadas que nunca.
Bebe mucha agua
Cuando hablamos de mucha agua, tampoco estamos diciendo que tenga que ser demasiada. Porque el agua es necesaria para poder hidratarnos pero no solo la vamos a necesitar a modo de vaso de agua sino que en infusiones o sopas ya la estaremos tomando de igual manera. Lo cierto es que debemos beber alrededor de dos litros de agua. Si se te hace mucho solo de pensarlo, intenta tomarla con limón o bien, en tés o infusiones, como hemos mencionado. Seguro que de este modo ni te darás cuenta. Deja de lado los refrescos con azúcares o los zumos envasados porque cuentan con más azúcares de los que pensamos.
Opta por los alimentos frescos y de temporada
Sin duda, cuando vamos a hacer la compra, tenemos que priorizar. Siempre que podamos, lo mejor es llenar el carrito con alimentos frescos y que son propios de la temporada en la que estemos. Más que nada porque así nos daremos cuenta de que estamos ante alimentos básicos y llenos de las mejores propiedades. Cuando están en su punto, serán vitales para nuestra salud porque captaremos todos y cada uno de sus beneficios.
Limita el azúcar y las grasas
No es cuestión de eliminarlos del todo, pero sí de limitar el consumo siempre y cuando podamos. Porque como todo en esta vida, cuando abusamos de ciertos alimentos, también tendremos una serie de consecuencias. De ahí que todo en su límite sea más que bueno. Algunas frutas o vegetales, por ejemplo, ya cuentan con sus propios azúcares en forma de fructosa, por lo que ahí ya nos podemos dar el capricho pero de una manera más natural. Lo que sí debemos limitar el consumo es en productos de bollería así como las comidas más grasientas o fritas. Lo mejor es que dentro de los métodos de cocción se use al vapor, cocido o bien, a la plancha. Tres maneras más saludables y que nos deja un buen sabor para nuestros platos.
Quizás es una de las ideas o pasos para comer de forma saludable, a tener siempre en cuenta. Cuando pensamos con un poco de antelación en el menú de toda la semana, esto hace que tengamos tiempo de ir a la compra y de preparar todos y cada uno de los platos. Pero cuando no lo seguimos, las prisas de última hora, harán que echemos mano a cualquier alimento y ahí estará el fallo. Porque en muchas ocasiones comemos lo primero que nos encontramos y ese producto seguro que será del todo menos sano. No hace falta que te pases todo el fin de semana cocinando, pero sí pensando y elaborando una lista de las comidas a realizar durante los dos días siguientes. Así, podrás tener todo calculado, sin echar mano a esas comidas o alimentos prohibidos.
¡Muévete!
Aunque no es directamente comer de forma saludable, sí tiene mucha relación. Tras seguir esas ideas paso a paso, llega el momento de levantarnos de la silla y de movernos. Un poco de ejercicio físico cada día hará que nos sintamos más vitales y con energía, pero además, nuestro cerebro también nos lo agradecerá. Eliminaremos estrés, o por lo menos lo iremos dejando aparcado, porque no lo necesitamos para nada. Del mismo modo, tonificaremos el cuerpo y diremos adiós a esos kilos de más.